miércoles, 13 de febrero de 2013

Cómo afecta la medicación a nuestra salud bucal

77005439.jpgLa toma de medicamentos puede acarrear efectos colaterales en la salud bucal. En la mayoría de los casos se trata de efectos secundarios de poca gravedad, que causan molestias bucales en el día a día pero que no suponen un riesgo mayor para la salud. Sin embargo, si al ingerir algún medicamento se experimenta algún síntoma, debemos consultar al odontólogo.

El síntoma más habitual es la xerostomía, más conocida como sequedad bucal. Existen más de 400 medicamentos que pueden producir como efecto secundario una disminución del flujo de saliva. En consecuencia, el biofilm oral (placa bacteriana) puede acumularse en la cavidad bucal y causar mayor vulnerabilidad a las enfermedades de las encías (gingivitis, periodontitis), caries y mal aliento. Los medicamentos más habituales que pueden producir sequedad bucal son antihistamínicos, analgésicos, diuréticos, antidepresivos, antihipertensivos, etc., todos ellos fármacos de habitual prescripción.

Algunos fármacos alteran la composición de la placa dental y del PH de la boca, de manera que se es más susceptible a padecer caries. Además, el azúcar es el componente mayoritario de pastillas antiácidas, jarabes y gotas para la tos, productos a menudo tomados por niños. Que el medicamento esté endulzado puede ser particularmente problemático para aquellos que siguen terapias a largo plazo por enfermedades crónicas.

Por otro lado, en el caso de tomar anticoagulantes o antiplaquetarios, se debe notificar al dentista ante cualquier intervención. Estos medicamentos hacen que la sangre tarde más tiempo en coagular, lo que podría ocasionar sangrado de las encías.

Finalmente, algunos medicamentos pueden alterar el sentido del gusto, dejando un sabor metálico o amargo en la boca, o bien alterar el sabor de los alimentos al ser ingeridos. Entre estos fármacos se encuentran antibióticos, parches de nicotina, algunos inhaladores respiratorios, los utilizados para la regulación de la presión arterial, etc.

Estos son algunos de los efectos secundarios más comunes que pueden derivarse de la toma de medicamentos, ya que los fármacos también pueden alterar la salud bucal pudiendo provocar inflamación de los tejidos, ardor bucal, alteración del color de los dientes, entre otros.
 

  Dr. Claudio A. Sorrentino
  www.dentalpalermo.com.ar