La buena higiene bucal proporciona una boca que luce y huele saludablemente. Esto significa que:
- Sus dientes están limpios y no hay restos de alimentos
- Las encías presentan un color rosado y no duelen o sangran durante el cepillado o la limpieza con hilo dental
- El mal aliento no es un problema constante
Si las encías duelen o sangran durante el cepillado o la limpieza con
hilo dental, o usted sufre de mal aliento persistente, visite a su
odontólogo. Cualquiera de estas infecciones indican un problema. Su odontólogo o higienista lo ayudarán a desarrollar buenas técnicas
de higiene bucal y le enseñarán a detectar las áreas que demandan una
atención especial durante el cepillado y la limpieza con hilo dental.
¿Cómo se practica la buena higiene bucal?
Una de las cosas más importantes que usted puede hacer por sus
dientes y encías es mantener una buena higiene bucal. Los dientes sanos
no sólo le dan un buen aspecto a su persona y lo hacen sentirse bien,
sino que le permiten hablar y comer apropiadamente. La buena salud bucal
es importante para su bienestar general.
Los cuidados preventivos diarios, como el cepillado y uso de hilo
dental, evitan problemas posteriores, y son menos dolorosos y menos
costosos que los tratamientos por una infección que se ha dejado
progresar. En los intervalos entre las visitas regulares al odontólogo, hay
pautas simples que cada uno de nosotros puede seguir para reducir
significativamente el desarrollo de caries, las enfermedades de las
encías y otros problemas dentales:
- Cepíllese en profundidad y use hilo dental por lo menos dos veces al día
- Ingiera una dieta equilibrada y reduzca las ingestas entre comidas
- Utilice productos dentales con flúor, inclusive la crema dental
- Use enjuagues bucales fluorados si su odontólogo lo indica
- Asegúrese de que sus hijos menores de 12 años beban agua fluorada o si vive en una zona de agua no fluorada, adminístreles suplementos fluorados.
Dr. Claudio A. Sorrentino