Si le han diagnosticado enfermedad periodontal (de las
encías), es bueno saber que a menudo se le puede dar tratamiento exitosamente.
El primer paso no-quirúrgico por lo general incluye una
limpieza especial, llamada “raspaje y alisado radicular”, para remover la placa
dental y los
depósitos de tártaro en las superficies de los dientes y de
las encías. Este procedimiento ayuda a sanar al tejido de las encías y a
reducir las bolsas
periodontales. El procedimiento se conoce en a veces como
“limpieza periodontal” o “raspaje y alisado radicular”.
Además se le puede recomendar medicamentos para ayudar a
controlar la infección y el dolor, o para ayudar la cicatrización. Estos
medicamentos incluyen antibióticos, un enjuague bucal o una sustancia que el odontólogo
coloca directamente en la bolsa periodontal luego del detartraje y alisamiento
radicular.
En la siguiente visita, se chequea la profundidad de las
bolsas periodontales para determinar el efecto del detartraje y alisado
radicular. En este punto, muchos pacientes no requieren más tratamiento activo,
solamente cuidados preventivos. Si las bolsas periodontales son profundas y el
hueso de soporte se ha perdido, puede ser necesaria la cirugía para prevenir la
pérdida de los dientes.
Se pueden usar férulas, guardas oclusales u otros
dispositivos para estabilizar los dientes flojos y para ayudar a la
regeneración de los tejidos durante la
cicatrización.
Puede que se necesiten limpiezas y chequeos más frecuentes
para mantener sus encías libres de enfermedad. Si fuma, pídale a su médico
información sobre maneras para dejar el hábito. El tabaco contiene químicos que
retrasan el proceso de cicatrización de los tejidos de sostén del diente.
Usted no tiene que perder dientes por causa de las
enfermedades periodontales. Cepíllese, límpiese entre los dientes, siga una
dieta balanceada,
evite el tabaco y programe visitas regulares al odontólogo
para tener una vida de sonrisas saludables.
Dr.
Claudio Sorrentino
Charcas 3127 - 4826-1505